De acuerdo a la Real Academia Española (RAE), el estrés es la “tensión provocada por situaciones agobiantes que originan reacciones psicosomáticas o trastornos psicológicos a veces graves”.
El estrés ocupacional implica todas aquellas
reacciones psicológicas y conductuales causadas por las presiones y demandas de
los empleadores (o clientes) u otros factores como el ambiente laboral.
El estrés es una reacción a estímulos
particulares con un rango de respuestas fisiológicas y psicológicas. El estrés
desencadena una respuesta fisiológica con aumento de los niveles
de catecolaminas. Aunque la excitación y estimulación pueden promover el
aprendizaje, la cognición y la toma de decisiones, el estrés, implica un nivel
de estimulación o una respuesta que es perjudicial o desadaptativo y generar
agotamiento. A su vez el agotamiento puede provocar una disminución de la
longevidad y el rendimiento laboral y por lo tanto peor resultado para los
pacientes. Es importante precisar, que las respuestas varían de una persona a
otra y con el tiempo, el mismo nivel o situación de estímulo puede producir
diferentes respuestas en diferentes individuos o en el mismo individuo en
diferentes momentos.
El agotamiento anteriormente señalado está muy
relacionado con el síndrome de burnout. El
síndrome de burnout (síndrome de estar quemado) fue estudiado por
primera vez por Freudenberg en 1974, a partir de su experiencia y lo que
observaba en un centro de adicciones. Freudenberger describía que el
personal desarrollaba ánimo depresivo,
pérdida de energía y falta de motivación para el trabajo. Al cabo de un tiempo se
tornaban poco empáticos, insensibles y distantes con los pacientes. Para
prevenir el burnout, Freudenberg proponía disminuir las horas de trabajo, hacer
rotaciones laborales regulares, supervisión frecuente y capacitación frecuente.
Paralelamente, Cristina Maslach dividió el
burnout en 3 dimensiones: agotamiento emocional, despersonalización y un bajo
sentido de logro personal entre individuos cuyo trabajo implica atención o
ayuda a personas, además de desarrollar la primera encuesta para medir la
incidencia y la gravedad del síndrome.
Es un fenómeno multicausal
definido como “un estrés crónico
producido por el contacto con los pacientes que lleva a la extenuación y al distanciamiento emocional con los
pacientes”.
El Burnout consta de 3 características: agotamiento emocional, despersonalización
y sentido de logro reducido.
El cansancio emocional se refiere a la perdida de energía,
agotamiento, fatiga que pueden expresarse física y/o psicológicamente.
La despersonalización es el cambio en la actitud hacia otras
personas, se puede llegar a deshumanizar la práctica laboral, en el terreno de
la medicina considerar al paciente como una estadística o una enfermedad.
La falta de realización personal implica la desmoralización y
pérdida de valor del trabajo que tenía para la persona afectada.
En el año 2000, la Organización Mundial de la Salud declaró al
síndrome de Burnout como un factor de riesgo laboral que afecta la calidad de
vida, salud mental e incluso puede poner en riesgo la vida.
Maslach propone 6 factores que se asocian al burnout:
1. Sobrecarga de trabajo
2. Falta de control
3. Recompensa insuficiente
4. Comunidad en el trabajo
5. Ausencia de equidad
6. Conflicto de valores
Tratamiento y prevención
Las intervenciones se pueden dividir en 2 tipos de estrategias:
- Ayudar a disminuir el estrés: métodos de meditación, programas de entrenamiento de manejo de estrés o grupos de discusión.
- Ayudar a modificar el entorno de trabajo.
Es importante que el personal de salud adapte sus expectativas a la
realidad cotidiana, tratar de equilibrar las diversas áreas de la vida (familia,
amigos, aficiones, descanso, trabajo), fomentar un entorno laboral favorable, limitar
la agenda laboral y realizar formación continua dentro de la jornada laboral
El Colegio Americano de Médicos de emergencia hace algunas
recomendaciones concernientes a los ritmos circadianos y los cambios de turno:
- Guardias de noche aisladas o ampliar el tiempo entre guardias nocturnas
- Evitar turnos prolongados
- Los turnos deben durar 12 horas o menos
- Turnos rotativos en sentido horario
- Periodos programados regulares de al menos 24 horas fuera del trabajo